Que suerte tenemos de que napolitanos quieran abrir negocios en Madrid y nos permitan, a los que vivimos siempre con nostalgia de Italia, encontrarnos con sus sabores en algunos rincones de Madrid.

Cuatro locales y los que vendrán. Comenzaron en Santa Engracia, no creo que llegue a dos años, y ya cuentan con locales en Hermosilla, Pez y Gaztambide.

Este último es el que pude visitar y disfrutar. Trato magnífico y atento, servicio rápido y local cuidado y agradable.

La carta:

Nuestra selección tras haber cotilleado las reseñas de Google fue la Borghese, de 10; la Cantábrica y la Grosso. Ricas hasta decir basta, que cambio produce en el sabor un buen horno de leña.

Un vinito lambrusco rosso y una cuenta que no llegó a 20 ni de lejos.

No os olvidéis de estas pizzas, no es Nápoles, pero si cierras los ojos al comerlas, podría parecerlo.

Grosso Napoletano

Varias direcciones: