Una vez al año, es una visita obligada, por su comida y esencia, preferiblemente en invierno. No dejo de ir año tras año desde hace tranquilamente 10. Y ¿Por qué? ahora os lo cuento.
La Fondue de Tell es un rincón de Suiza en Madrid, un local chiquito de madera que te traslada a Suiza, a sus campos verdes, a su cálido frío, y sobre todo a su exquisita gastronomía.
Para ir a este restaurante de Madrid, en pleno corazón de Malasaña, hay que reservar, porque no tiene un salón muy amplio. Lo mejor es ir en grupo, de 4 a 8 sería lo ideal, porque como dicen en su web ‘Compartir es más’.
La dirección corre a cargo de Marlene Tellenbach y Mariano Rodríguez, una exquisita mezcla hispano- suiza, que es todo un referente.
Según cruzas su puerta de madera labrada, estás en Suiza, madera tallada, cuernos de los alpes, cencerros, vidrieras de colores, relojes de cuco, y un ambiente confortable.
Su carta repleta de especialidades con sus tradicionales raclette y fondue. Es recomendable ir en compañía porque te dará la excusa perfecta para probar más, y además tendrás la ocasión perfecta para una comida de larga conversación, en la Fondue de Tell, comer es una experiencia de al menos, un par de horas.
Vamos con la carta y fotos de todo lo que os estoy contando:
La Carta:
Y ahora lo principal, la comida:
Siempre pedimos la Chinoise porque es una maravilla de sabor, y en vez de aceite haces la carne en un caldo espectacular que luego degustas y te hace revivir. Mi recomendación es que pidáis vino blanco, o rosado para maridar esta comida.
El precio con café es de unos 35 euros , pero os aseguro que merecerá cada euro invertido.
Os dejo además, un pequeño vídeo de un regalito que realizan de bienvenida:
Dirección
Calle Divino Pastor, 12
28004 Madrid
Contacto
Email: contacto@lafonduedetell.com
Reservas sólo por teléfono
Tel. 915 94 42 77
Horario
Abierto todos los dias
13.30h – 16h
20.30h – 24h
Por todo lo alto 
Hemos ido mi novia y yo a celebrar el aniversario y ha sido un acierto, la Chinoise riquísima y la manzana con arenques del entrante, parece una combinación rara, pero estaba excepcional.
Sitio magnífico con una atención buenísima. Repetiremos seguro.
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