Este verano no hacía más que leer opiniones sobre «la Tita Rivera», y viviendo como vivo en el centro de la ciudad pues me parecía feo no conocerlo. Como hace estos días con temperaturas tan agradables en Madrid, el sábado con unos amigos fuimos con la intención de conocerlo y tomar una cerveza, no os digo más que hicimos sobremesa.

Con el día que hacía cómo es lógico estaba todo el mundo disfrutando de la terraza y el interior estaba vacío. El patio está cuidadosamente colocado, todo lleno de detalles en las paredes, en las mesas, etc.

Lo primero a destacar la carta, genial, divertida, diferente. Una de las cosas que siempre he admirado de Italia es la opción de sentarte en cualquier bar, aunque sea de un pueblo pequeño, y tener una amplia gama de opciones para tomar algo; en España escaseamos;  refrescos, o cerveza, o poco más. Poco a poco rompemos esas tradiciones y para ejemplo la carta de “la tita rivera”, sus sidras de sabores, sus “la titas” variadas, sus opciones de cervezas, y mucho más.

Junto a la bebida y por las horas del mediodía que eran, tomamos un picoteo: unas ricas croquetas de “huevos fritos con chorizo” y una bandejita de “casis”, (unos panecillos de diversos rellenos a elegir, deliciosos todos ellos, que yo personalmente no conocía). La sidra con sabor a Pera estaba muy buena, y como no paramos de ver pasar comida, al final decidimos seguir allí. Para seguir probando carta de bebidas lo siguiente fue una “latita” de rebujito, con su hierbabuena y todo. Luego una degustación de mini hamburguesas y unos fingers de pavo. Todo riquísimo y abundante, rápido y con un servicio de camareros impecable.

Finalmente café y un “mojiño”, un cocktail que se han sacado de la manga hecho con Licor de hierbas, está riquísimo.

Al final la cuenta no llego a 30 persona y la experiencia maravillosa, ya tienen una nueva y fiel clienta.

La Tita Rivera

Calle de Pérez Galdós, 4,

28032 Madrid
915 22 18 90

Ya sabéis planes estupendos para bolsillos discretos.

¡Nunca más tendrás la agenda vacía!