Hace unos meses cuando descubrí el genial Gumbo de comida cajún me dio por acceder a la calle del Pez por la Corredera baja de San Pablo, y quedé sorprendida al ver el bullicio y ambiente que tenía la calle. La Corredera Baja, antiguo camino de San Idelfonso, lugar donde acaba esta calle del Barrio de Maravillas es sin duda hoy un referente del ocio madrileño. Desde la Plaza de Santa María de Soledad Torres Acosta (la Plaza de Luna de toda la vida) hasta el final es un sin parar de locales, yo logré conocer 4, pero os aseguro que la oferta es amplia y variada y os da para ir y volver en varias ocasiones. Y eso sin contar que os desviéis por la calle Pez.
Loreto Coffee Bar nº 6
Haciendo esquina este coqueto bar tiene varias mesas donde tomar algo, o comer y cenar si toca por la hora. Una mini barra donde también puedes acercarte y esperar mesa mientras te tomas una cerveza o un café. Buen ambiente y de bullicio no excesivo. Además el precio es muy atractivo.
El circo de las Tapas, nº 21
Un lugar muy curioso de decoración y ambiente, hay de todo, intercambio de idiomas, paredes blancas tipo andaluz, mesas bajas para una copa, medianas para picar o cenar y barra para alternar. Desayunos, copas, cervecita, lo que queráis y además con detalle, repetiré seguro.
Aìo, nº 25
No nos vamos muy lejos, y nos encontramos esta media taberna italiana, madera, grafitis en las paredes, bicicletas y aparcamiento en planta baja para ellas, fotografías, y dueños sardos. Un genial ambiente para degustar una rica Ichnusa, cerveza de Cerdeña, y unas pizzetas maravillosas para acompañarlas. Además muchos platos ricos italianos, baratos y de nuevo con un ambiente estupendo.
Bar Galleta nº 31
El broche final, o de comienzo según os apetezca. Aquí la cosa es más seria, unos exquisitos desayunos, un «entre horas» estupendo, comidas y cenas, todo ello con carta independiente en cada caso. Y además asegurado los dulces tienen galleta ¿Por qué? Pues por qué si no he leído mal en internet uno de los socios es heredero de esta maravillosa tradición que son las galletas fontaneda. Vale si aún no estáis convencidos, os propongo una decoración genial de mano de tres conocidos decoradores Tomás Alía, Nacho García de Vinuesa, o Lázaro Rosa, un ambiente romántico, tranquilo, distendido; y podréis ir a cualquier hora, un brunch, un cava, una cervecita…no os puedo decir más.
Ya sabéis planes estupendos para bolsillos discretos.
¡Nunca más tendrás la agenda vacía!