El lunes más triste del año, decían los titulares de los periódicos. Pues ya que tenemos el dicho, hagamos uso de él: «al mal tiempo buena cara»

Habíamos elegido un restaurante por el CV del dueño y cocinero, Javier Larios «Gucho«. Gucho, como dijo que él que le llamásemos ha trabajado con los mejores, y muestra de ellos son tres platos, que aparecen como «autorizados» y que han sido aprendidos en las cocinas de los autores originales y que en todos los casos han autorizado al Gucho a usarlos en su local.

El restaurante

Impresionante que este delicioso lugar esté en el rincón de Madrid en el que está. Perdido entre las calles de Infanta Mercedes, en la calle General Ramirez, 16 aparece el bonito restaurante.

Su decoración es perfecta, divertida, totalmente apropiada, luminoso, amplio, pero con pocas mesas. Un 10 a la ambientación del sitio, y también a los detalles, os invito a ir y conocerlos.

La Carta

Vamos al tema, aquí la carta es la protagonista, como debe de ser en un restaurante, que sea la cocina la que domine la experiencia.

Y así fue. Del servicio os hablaré luego, aquí me centraré en la carta, la cual era tan apetitosa que decidimos dejarnos aconsejar por el cocinero, lógicamente pensamos que ponernos en manos de Gucho que habla de sus platos con tanto cariño iba a ser un acierto. No fallamos.

Su selección:

Para ir abriendo boca, y como estábamos de celebración el aperitivo fue un cocktail llamado Portonic, oporto blanco y tónica, una delicia y muy fresquito.

Para ir pasado el cocktail, unas olivillas, unas patatas fritas, unos torreznos de Soria, o como era el día de la croqueta, o porque a todo el mundo gusta, un par de croquetitas deliciosas.

Y comenzó la pasarela gastronómica, acompañado de un rico tinto, también elegido por ellos, un Laya, que estaba estupendo.

De momento no se vosotros, pero nosotros estábamos encantados, los platos deliciosos, no destaco ninguno por encima porque era todos una explosión de sabores y calidades.

A partir del final de la cena, cuando ya estábamos saciados, y contentos por haber cenado así. Gucho terminó de hacer brillar nuestra celebración.

Ahora toca hablar del servicio, que es de 10, como todo lo demás. No puedo saber como será cuando está lleno el restaurante, pero como habíamos elegido un lunes porque era una celebración especial, estábamos solos. La cocina de Gucho ese lunes noche cocinó para nosotros, un verdadero lujo.

Y Gucho y su camarero pusieron la guinda al pastel. Gucho es un cocinero amante de su profesión, que proyecta amor por la cocina, por el producto, por la buena gente, por el buen hacer. Parlanchín, cercano, amigable, como si le conocieras desde hace años, una verdadera experiencia.

Esta empezando con este restaurante, su última apuesta para dar a conocer su amor por la cocina. Hay que ir a probar su cocina, a conocer su amor por el producto, a pasar una comida o cena agradable, a disfrutar de una de las mejores experiencias gastronómicas.

Y el detalle final, que para eso era un cumpleaños:

Y os diré nuestra cuenta final de 72 euros, la cual sorprende pues no es habitual vivir estos platos gastronómicos de alta cocina a estos precios. Y deciros que podéis comer sin dudarlo y Por todo lo alto, por menos de 20 euros.

¡Estoy deseando repetir!

La Cocina de Gucho

910 39 24 51

HORARIO

Comida: de 13:00 a 15:30 (excepto lunes y martes)

Cena: de 21:00 a 23:00 (excepto martes y domingo)

Ya sabéis planes estupendos para bolsillos discretos.

¡Nunca más tendrás la agenda vacía!