Ha terminado el verano, las vacaciones, los atardeceres en las playas, los chiringuitos… Y por que engañarnos, estamos tristes. Un larguísimo invierno por delante hace imposible visualizar el próximo descanso.
Bueno no todo está perdido, no podemos recuperar las horas de sol, la playa, ni el chiringuito, pero si los que vivimos en Madrid podemos disfrutar de la gastronomía del sur.
El Lambuzo aterrizó hace relativamente pocos años en Madrid, allí llegaba una familia, dedicada de siempre a la restauración en Sevilla, que buscaban nuevos horizontes en Madrid. Los encontraron.
Primero apertura en la calle Conchas, a los meses otra en plena calle Ponzano. Ambas dos hoy son un clásico del tapeo madrileño. Trajeron todos los productos y sabores de Cádiz y Sevilla, e instalaron las tradicionales tapas, medias raciones y raciones andaluzas.
Ensaladilla de langostinos
Tortillita de camarones
Albóndigas de chocó
Salmorejo
Solomillo al whiskey
Las deliciosas croquetas de gambas al ajillo
Coquinas al oloroso…
Y como no, fino, manzanilla, rebujito…
Todo casero, cocinado con cariño y atendido con salero y profesionalidad.
No tenemos Cádiz pero tenemos el Lambuzo.
Ya sabéis planes estupendos para bolsillos discretos.
¡Nunca más tendrás la agenda vacía!